Así evita México un “apagón logístico” gracias a la logística 4.0

Por María José Gamba Santibañez

El pasado 11 de junio, El País publicó un análisis contundente: el mundo podría estar al borde de un “gran apagón logístico”, una crisis de abastecimiento y distribución que colapsaría cadenas de suministro debido a factores como pandemias, conflictos geopolíticos, ciberataques o fallos en infraestructura. Para evitarlo, el sector logístico global se está transformando mediante tecnología avanzada, automatización y resiliencia operativa.

Este concepto de “apagón logístico” ha tomado fuerza entre los líderes del sector. En Europa, durante el Salón Internacional de la Logística (SIL) en Barcelona, se discutieron medidas urgentes que gobiernos y empresas deben adoptar para mantener operativas sus cadenas, incluso en escenarios adversos.

Qué es un “apagón logístico”

El término no hace referencia a la falta de electricidad, sino a la interrupción generalizada de procesos logísticos. Desde fábricas hasta almacenes, desde proveedores hasta puntos de venta: si la red se rompe en uno de sus eslabones, el impacto se multiplica.

Esto ya se vivió parcialmente durante la pandemia, cuando los retrasos portuarios, el desabasto de contenedores y la escasez de mano de obra paralizaron sectores completos. El mensaje es claro: la logística no puede seguir operando como antes.

Hacia una logística más resiliente

Para resistir estas posibles crisis, el sector está evolucionando hacia lo que se conoce como logística 4.0. No se trata solo de digitalización, sino de conectar todos los puntos críticos del sistema mediante tecnología inteligente y automatización. Algunas de las herramientas clave ya implementadas en otros países incluyen:

• Trazabilidad en tiempo real, mediante sensores IoT conectados a plataformas que permiten seguir cada carga desde su origen hasta su destino.
• Automatización en almacenes, con cobots (robots colaborativos) que organizan inventarios, preparan pedidos y reducen errores.
• Gemelos digitales, que simulan virtualmente operaciones logísticas completas para predecir fallas y tomar decisiones antes de que ocurran problemas reales.
• Análisis predictivo con inteligencia artificial, útil para anticipar interrupciones, reorganizar rutas o prevenir sobrecargas.

La combinación de estos sistemas no solo mejora la eficiencia diaria, sino que ofrece algo mucho más valioso: la capacidad de adaptarse rápidamente ante cualquier eventualidad.

México y el reto logístico

México tiene una ubicación privilegiada y un papel cada vez más importante en las cadenas de valor globales. Sin embargo, también enfrenta desafíos estructurales: infraestructura desigual, digitalización parcial y falta de estandarización en muchas operaciones.

A pesar de esto, ya hay avances. Algunas empresas están invirtiendo en sistemas de gestión digital, rastreo en tiempo real y automatización parcial de almacenes. El nearshoring ha acelerado esta transición, pues las compañías que trasladan su producción a México exigen rapidez, confiabilidad y tecnología.

Pero aún queda mucho por hacer. Para evitar que nuestro país quede expuesto a futuras disrupciones, se necesita una política nacional que impulse la logística 4.0 desde tres frentes:

1. Infraestructura tecnológica: conectividad robusta, sensores, software y plataformas integradas.
2. Talento capacitado: técnicos y operadores preparados para trabajar con sistemas inteligentes y datos.
3. Colaboración público-privada: alianzas entre empresas, instituciones educativas y gobiernos para fomentar innovación y financiamiento.

Cómo empezar la transición

Adoptar una logística inteligente no es una tarea inalcanzable. Existen pasos concretos que empresas grandes, medianas y pequeñas pueden comenzar hoy mismo:

• Integrar soluciones de trazabilidad digital.
• Automatizar procesos repetitivos o críticos en centros logísticos.
• Capacitar al personal en tecnologías emergentes.
• Establecer protocolos de resiliencia operativa frente a crisis.

Estas medidas permiten reducir el riesgo, optimizar recursos y brindar un mejor servicio al cliente.

México puede evitar un colapso logístico si actúa ahora

La advertencia está sobre la mesa: si no transformamos nuestra cadena logística, los próximos eventos globales podrían afectarnos con más fuerza que nunca. La buena noticia es que también tenemos la oportunidad de hacer las cosas bien. La logística 4.0 no es una utopía: es una necesidad urgente.

Control Terrestre, como operador logístico que apuesta por la innovación, trabaja precisamente en integrar tecnología, automatización y trazabilidad para ofrecer soluciones modernas, seguras y preparadas para el futuro. Porque evitar un apagón logístico no solo es posible: es responsabilidad de todos los que movemos al país.